Realmente poco le duró la alegría a A-Kid tras protagonizar en Total Rumble VI uno de los mejores combates que se recuerden sobre el ring de la Triple W, en el que se enfrentó al entonces campeón, Lukas Skott. Aquel día marcaba el camino hacia una nueva etapa en la White Wolf Wrestling. LSK se olvidaba de rencores pasados, y se rendía ante el fabuloso porvenir del joven luchador que le arrebató el campeonato. Fue entonces cuando, en un precioso gesto, Skott "pasaba la antorcha" al nuevo campeón de la Triple W, en un gesto que auguraba un gran porvenir para A-Kid.
Sin embargo, Orión, ganador del una Rumble en la que ni siquiera tenía plaza (apareció como suplente, ante la no participación de Caretaker), se hizo con el valioso contrato Top 1, que le daría derecho a luchar por cualquiera de los campeonatos de la asociación. En New Age, tras algún que otro rifi-rafe con su compañero Elvis, sobretodo, tras haber perdido sus Campeonatos de Parejas, aparcó sus diferencias marcando un camino en equipo... Sin embargo, la aparición de Rod Zayas en el Main Event que enfrentaba a Hades y el Campeón A-Kid, quien protagonizaba su primera defensa titular, precipitó los acontecimientos, y Orión, para sorpresa de todos, canjeó el Top 1 y logró tumbar tanto a Hades como al campeón A-Kid, para lograr el oro, dejando a todos los presentes en shock.
New Age significaba el comienzo de una nueva etapa, una nueva era: Orión se lo tomó al pié de la letra.
